Recorrer en
tren los 9.288 km de la ruta transiberiana que unen Moscú con
Vladivostok es una experiencia inolvidable, que requiere tener en cuenta
algunos tips, que les compartimos.
El Transiberiano llegando a una de sus estaciones | |
Texto: Aldana Chiodi
Fotos: Aldana Chiodi y Dino Feldman
La ruta transiberiana es
atravesada por una gran cantidad de trenes de todas las categorías. Los
más modernos y caros son los conocidos como firmenny y suelen tener nombres propios como “Rossiya”, el que también se nombra como el Expresso transiberiano.
Los demás trenes están identificados con números y es bueno saber que
cuánto más alto es el número más lento es el tren. Además de las
categorías de trenes, hay categorías de vagones. La tercera clase o platskart
son vagones con camas tipo litera, sin compartimentos y hay camas tanto
en posición perpendicular a las ventanas, como en en el pasillo del
tren. La segunda clase o kupe son vagones divididos en compartimentos con 4 camas literas cada uno y no hay camas en el pasillo. La primera o spalny son vagones divididos en compartimentos con dos camas o literas cada uno.
El viaje completo desde Moscú a
Vladivostok, sin escalas, tiene una duración de entre 6 y 7 días
dependiendo del tipo de tren que se elija. Una buena opción para cambiar
de aire y descubrir parte de la historia y las tradiciones rusas es
realizar algunas paradas en el camino. Por ejemplo, detenerse en la
localidad de Perm y visitar el museo Perm-36 (http://www.sitesofconscience.org/es/sitios-2/sitios-acreditados/gulag-museum),
un antiguo campo de prisión que se conocían como gulag, y continuar
hasta la ciudad de Yekaterimburg, desde donde se puede contratar una
excursión para visitar los montes Urales, división geográfica entre
Europa y Asia. Una vez en el continente asiático, se pueden recorrer
ciudades más pequeñas como Tomsk, en donde verán las construcciones de
madera típicas de la región siberiana. Por último, un lugar imperdible
para descansar por unos días es el lago Baikal, el más profundo del
mundo. Los paisajes del lago y de la isla Olkhon son bellísimos y
transmiten una sensación de paz que el viajero no olvidará por mucho tiempo.
Viajemos en la categoría que viajemos y hagamos el recorrido que hagamos es bueno tener en cuenta algunos tips:
Cuándo ir
El recorrido se puede realizar tanto en invierno como en verano y depende del gusto del viajero y de
los paisajes que quiera disfrutar. Si se viaja en invierno es necesario
contar con ropa adecuada para las temperaturas bajo cero de Siberia,
sobre todo si se tiene la intención de visitar ciudades y pueblos. Sin
embargo, la mejor época para viajar es desde mayo hasta fines de
septiembre.
El horario
Rusia posee siete usos horarios,
es decir que mientras en Moscú son las 12 del medio día, en Vladivostok
son las 7 de la tarde. Es necesario tener en cuenta este detalle porque
toda la ruta transiberiana está organizada con el horario de Moscú. Es
decir que los horarios que figuran en los tickets, en las pantallas de
las estaciones y en el propio tren son horarios de Moscú. Por lo tanto
se debe estar muy atento a este detalle para no perder ningún tren o no
esperar interminables horas en el andén.
Los tickets
Si la intención del viaje es hacer
paradas en las ciudades y pueblos intermedios entre Moscú y Vladivostok
es necesario comprar los tickets por tramos, ya que no existe la
posibilidad de comprar un ticket de todo el recorrido y subir y bajar
cuando uno quiera.
Para comprar los tickets existen algunos sitios de Internet que permiten hacerlo. El sitio web oficial para ello es http://rzd.ru/
pero no tiene desarrollada la compra en línea en otra lengua que no sea
ruso, por lo tanto necesitaremos la ayuda de un local. Igualmente,
existen sitios web en inglés donde se pueden comprar los tickets
mediante el pago de alguna comisión:
Otra buena opción es intentar
comprar los tickets en la misma estación de tren acompañado por alguien
que hable ruso. De esta manera no se paga comisión y podemos averiguar
en el momento las distintas opciones para llegar de una ciudad a la
otra, ya que muchas veces los tickets para los trenes directos están
agotados, pero se pueden hacer combinaciones con otros trenes y llegar a
destino.
Entre mayo y septiembre, pero
principalmente entre julio y agosto, es necesario estar atento a la
disponibilidad de tickets, ya que son los meses con más turistas
extranjeros y con más movimiento de rusos porque coinciden con sus
vacaciones.
Las paradas
Los trenes suelen cubrir largas
distancias y realizar varias paradas en sus recorridos. Algunas son muy
cortas, de 1 o 2 minutos, mientras que otras pueden durar entre 15 y 30
minutos. Esta información figura en un cartel en la entrada de cada
vagón. Además, en las estaciones también hay carteles que indican el
tiempo que el tren permanecerá en el andén. Es muy importante conocer
esta información para saber cuánto tiempo podemos bajar al andén durante
una parada o conocer de cuánto tiempo disponemos para subir por primera
vez a cada tren. Esto es importante porque a veces los trenes son muy
largos y solo paran 2 minutos en la estación, entonces, si estamos en un
extremo del andén y el vagón al que nos debemos subir se encuentra en
el otro extremo, debemos correr rápidamente para no perder el tren. Para
evitar este tipo de problemas, algunas estaciones tienen carteles en
los andenes que indican el lugar aproximado en donde para cada categoría
de vagón.
Los documentos
Durante todo el recorrido debemos
tener los tickets y el pasaporte “a mano”, ya que los suelen pedir
varias veces, sobre todo la primera vez que se sube a cada tren.
La provodnitsa
Todos los vagones cuentan con una
“provodnitsa” (generalmente, una mujer), que es la persona encargada del
vagón. Ella se ocupa del control de los pasaportes y tickets, entrega y
recolecta las sábanas y almohadas, presta las tazas y cucharas para el
té y, a veces, hasta vende algo de comida.
Comida y bebida
Todos los vagones, sea de la
categoría que sean, tienen un samovar con agua caliente para preparar
cualquier tipo de infusión. La mayoría de las personas llevan saquitos
de té o fideos deshidratados para el almuerzo o la cena.
En algunas categorías de vagones te ofrecen tazas y cucharas, pero por las dudas es aconsejable tener los propios.
En las estaciones donde el tren
realiza paradas más largas se puede comprar comida casera que ofrecen
los pobladores de ese pueblo o ciudad donde el tren se detiene. Allí
encontraremos desde pescados ahumados hasta sopas y arroyados.
Los trenes de mayor categoría cuentan con un vagón comedor.
La ruta transiberiana se une con
la transmongoliana en la ciudad de Ulan Ude, y con la transmanchuriana
en la ciudad de Tarskaya. Ambas rutas siguen su recorrido hasta la
ciudad de Beijing, en China. Un viaje increíble e inolvidable, que vale
la pena experimentar.
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